miércoles, 2 de febrero de 2011

Fragmento "Marina" - Carlos Ruiz Zafón

Mi amigo Óscar es uno de esos príncipes sin reino que corren por ahí esperando que los beses para transformarlos en sapo. Lo entiende todo al revés y por eso me gusta tanto. La gente que piensa que lo entiende todo a derechas hace las cosas a izquierdas, y eso, viniendo de una zurda, lo dice todo.

Me mira y se cree que no le veo. Imagina que me evaporaré si me toca y que si no lo hace, se va a evaporar él. Me tiene en un pedestal tan alto que no sabe cómo subirse. Piensa que mis labios son la puerta del paraíso pero no sabe que están envenenados. Yo soy tan cobarde que por no perderle, no se lo digo. Finjo que no lo veo y que sí, que no me voy a evaporar

Mi amigo Óscar es uno de esos príncipes que harían bien manteniéndose alejados de los cuentos y de las princesas que los habitan. No sabe que es el príncipe azul quien tiene que besar a la bella durmiente para que despierte de su sueño eterno, pero eso es porque Óscar ignora que todos los cuentos son mentiras, aunque no todas las mentiras son cuentos. Los príncipes no son azules y las durmientes aunque sean bellas, nunca despiertan de su sueño.

Es el mejor amigo que nunca he tenido y, algún día me tropiezo con Merlín, le daré las gracias por haberlo cruzado en mi camino.

Fragmento "Aunque seamos malditas"- Eugenia Rico

Nunca debí volver. Uno vuelve porque espera encontrar algo, algo que cree que dejó olvidado y luego descubre que lo ha dejado en otra parte o que nunca supo dónde estaba. Uno no debe volver a los sitios donde fue feliz y mucho menos a los lugares donde ha sufrido tanto.

Ahora sé que las avispas han sido necesarias. Nunca debí volver. No me ha esperado el mar. Ni las cuatro casas que quedan en pie con los tejados de pizarra invadidos por el musgo y las raíces de los robles enganchadas en los zaguanes. Mi abuela no me ha esperado ni siquiera en el cementerio. Hace tiempo que sus huesos fueron desenterrados y arrojados a la fosa común. Entonces yo era demasiado pequeña para evitarlo. Todos a los que quise han muerto hace tiempo.

A este lugar no ha llegado el turismo rural ni nadie que repare los baches de la carretera. El viento sopla hasta el viejo faro que ya no alumbra. Las gallinas son las únicas que todavía deambulan por el pueblo, pero hasta ellas parecen perdidas.